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"¡Ay,
el gol! No lo cantamos en nuestro estadio desde hace un mes"
Unos actores y factores importantes aparecieron en escena y
esclavizaron el choque. Por un lado, el viento, actuando
Eolo como local en la primera parte y como visitante en la
segunda. Por otro lado, el césped tan alto que parecía más
una pradera. El equipo que mejor se adaptara a estos
condicionantes, tendría mucho terreno ganado… Y el gol. ¡Ay,
el gol! No lo cantamos en nuestro estadio desde que Lolo
Guerrero marcara ante el Extremadura, justamente hace un
mes. Marcar nos cuesta dos mundos.
Llegar se llega, crear se crea, pero
marcar no se marca y eso te deja marcado. Pudo llegar en el
13’, momento en el que Carri la enganchaba demasiado arriba,
cuando por espacio, tiempo y calidad pudo definir mejor la
prolongación de Pau Franch. ¡El punto de mira a la ITV! Pau
de cabeza, Pedro Ríos en centro que se envenenó por el
camino y un latigazo cruzado de Galindo que ríete de lo que
se pegan en 50 sombras de Grey.
"Al
descanso hubiera apretado el botón 'Me gusta' del Facebook"
Al descanso se llegaba incluso con
buen sabor de boca. Orden, trabajo, presión, dominio,
llegadas, pero sin gol. Si hubiera habido un botón Me
gusta del Facebook, le hubiéramos apretado. El rácano FC
Cartagena no nos había gustado.
A la vuelta de vestuarios, ¡que
llueva, que llueva y los jugadores salieron de la cueva! Lo
que parecía una fina lluvia pasó a convertirse en una
tormenta de época. Ya no eran veintidós futbolistas, sino
Rain Men. Cada rayo y cada trueno fueron coreados con un ¡ohh!
de sorpresa por parte del público. De nuevo comenzaba
avisando el Cartagena con un centro y/o chut de Rubén Cruz
que se paseó por el área sin rematador. La contrarréplica
llegaba en la conexión Pau-Carri-Óscar Martín con un
fantástico disparo del canario y con no menos fantástica
intervención de Marcos.
"Rubén
Cruz encontró la llave del candado de la portería de David
Ramírez"
De repente se consumaba una máxima muy antigua del fútbol:
quien perdona la paga. En el 63’ un clásico del gol: centro
de Hugo al segundo palo, tocaba Aketxe y Rubén Cruz bajo
palos, solo solito solo, adelantaba al Efesé. Fue una
cuchillada hendida en el alma. El ex del Cádiz había
encontrado la llave del candado de la portería de David
Ramírez.
Diez minutos más tarde, una pérdida
de balón de Pau, que pilla a nuestra defensa saliendo, fue
aprovechado por Aketxe para asesinar el partido. Pérez
Herrera buscaba pólvora, pero se mojó con la lluvia. Ya era
una quimera la remontada. Se impuso la eficacia a la
ansiedad.
Consumido el partido, no se puede montar un drama. Derrota
amarga y triste, sí, pero la batería de la fe ciega en este
equipo sigue al cien por cien. A tres del play-out y a
cuatro del descenso. El azulino lleva grabado a fuego el
sufrimiento en la frente".
La
galería contiene 26 fotos del partido San Fernando CD-Cartagena (pinche encima de cada foto para verla en un
mayor tamaño)
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