Monchi recibe el título de Hijo Predilecto de San Fernando y afirma que "soy un privilegiado"

El acto, que contó con el acompañamiento musical de la orquesta de cámara Detiqeta, llenó el Real Teatro de las Cortes y donde se dieron cita el presidente del Sevilla FC, José Castro, miembros del Consejo de Administración, el vicepresidente de la Federación Andaluza, José Antonio Bernal, el presidente del San Fernando CD, Louis Kinziger y su entrenador Pablo Alfaro, representantes de las hermandades de San Fernando, hostelería y comercio, peñas y entidades, asociaciones de vecinos y culturales, el presidente del CD Águila (que fue su primer club) Manuel Galea, así como la familia y amigos de Monchi y varios de los jugadores que fueron compañeros suyos en el CD San Fernando como Pablo De Diego, Mendi, Patudo, José Muñoz, Pepe Cortina y Juan José.

La intervención de Álex, hijo de Monchi

“Si me lo permiten, me gustaría comenzar esta breve intervención con una pequeña anécdota personal que suelo experimentar siempre que voy de viaje con mis amigos".

"Resulta que cuando estamos fuera de Sevilla y conocemos a un grupo nuevo de personas, al preguntarnos por nuestra procedencia, mientras alguno de mis amigos contesta rápidamente que somos de Sevilla, intentando hacer extensivo el comentario para todos los presentes, me acostumbro a saltar “menos yo, que soy de San Fernando” o si se da la circunstancia de que respondo el primero, suelo contestar “todos son de Sevilla menos yo, que soy de San Fernando”, con la consecuente risa de mis amigos y comentarios varios como “venga ya, si tú has vivido en Sevilla desde que naciste” o “siempre igual… si tú has nacido en el Puerta del Mar, en todo caso serías de Cádiz”.

“Y es verdad, yo nací en el Puerta del Mar y a los pocos días de nacer ya vivía en Sevilla, pero desde siempre me ha salido del corazón decir que soy de La Isla, como bien pone en mi DNI y como bien me ha hecho saber siempre mi padre".

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"También es verdad que mi padre sí que nació en San Fernando, en una vivienda situada en el humilde barrio de San Ignacio, donde se crió hasta los 20 años a caballo con el barrio de La Pastora, barrio en el que previamente nacieran su hermana Catalina y su hermano Manuel”.

“Allí en San Ignacio se encontraba la plazoleta que le vio iniciarse, primero como “delantero palomero”, ya que no le gustaba correr mucho, y luego como portero, jugando siempre con los mayores del barrio, por su buen nivel, en ese montón de tierra que tantos quebraderos de cabeza le diera a mi abuela Maruja y justo a escasos metros de esa plazoleta, se encontraba la casa y la calle donde vivía y conoció, siendo un joven adolescente, a la mujer de su vida, mi madre, a la que también le debo ese orgullo que siento por la ciudad de San Fernando”.

“Él nunca ha dejado de transmitirme su amor por la ciudad. Es el culpable de que hoy conteste de esa manera a la gente que me pregunta de dónde soy, de que no pare de presumir ante mis conocidos, incluidos extranjeros, de mi Isla y de repetir mil veces la historia de que justo en las puertas de la Villa de la Real Isla de León se frenó y derrotó a Napoleón y nunca llegó a ser conquistada por las tropas francesas. Que fue testigo de asentamientos fenicios, púnicos y romanos, pudiendo presumir de albergar el templo de Melkart, al que Julio César tanta devoción le tuviera en sus días. Que es tierra de artistas como Camarón, Sara Baras o la Niña Pastori, o alabar que ostenta el título de ciudad y que la habitan 100.000 isleños, o que, aunque no sea la ciudad más turística de La Bahía, tiene unos rincones de encanto y una playa de ensueño y que no sabe lo que se pierden sin pasear por la punta del Boquerón, por los esteros y salinas que rodean la ciudad, o sin probar un mediodía en el Bartolo o una tardebuena en el Naca”.

“Por otro lado, también me gusta presumir o comentar que San Fernando es una ciudad humilde donde predominan los pequeños comercios y la gente honrada, una ciudad marinera y de clase obrera, que aporta una enorme mano de obra a los astilleros de la Bahía y a la industria naval de la misma, industria en la que su padre Ramón trabajaba, pudiendo traer así el poco dinero que entraba en la casa, echando demasiadas horas como tornero u operario de la centralita eléctrica en la Fábrica de San Carlos, en “La Constructora”. Fue la honestidad y la humildad dos cualidades con las que mi padre desde pequeño tuvo que subsistir en su casa, junto a sus dos hermanos, su padre y su madre María, mi abuela Maruja, hoy aquí presente, ama de casa con mucho mérito al tener que sacar adelante a una familia y tener que bregar todos los días con el terremoto que tenía como hijo y tener que, con ayuda de su hija y hermana de mi padre, Caty, curarle las heridas que día sí y día también traía en las rodillas y en los codos provocadas por las pachanguitas que solía echar en la plazoleta del barrio”.

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“Quizás fue esa infancia humilde y la época en la que pudo disfrutar de dicha infancia, época en la que un crío sabía sacarle jugo a cada rincón del barrio y del entorno para distraerse, lo que le permitió impregnarse y enamorarse de su tierra natal y abanderarla, hasta hoy día, por todos los rincones del mundo”.

“Ello también le ayudó a conocer mejor la idiosincrasia de la ciudad, le ayudó a elevar a la máxima potencia sus tres pasiones y plasmarlas en su día a día, manteniéndolo hasta la actualidad y teniendo el placer de transmitírmelo desde que tengo uso de razón”.

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"Sus tres pasiones quedan ejemplificadas en:

“Su faceta cofrade, quizás la menos conocida, aunque últimamente venida a más, habiendo cargado hace apenas unos días a la Virgen de los Dolores de la Hermandad del Nazareno y a la Virgen de la Hermandad de Servitas. Y si algo destacamos de su pasión cofrade es su amor por su hermandad del barrio de La Casería, la Hermandad del Perdón, a la que tanto ayudó en sus comienzos y a la que tanta devoción ha prestado a lo largo de su vida, hermandad en la que pude compartir con mi padre en varias ocasiones el realizar estación de penitencia por las calles de la ciudad”.

“También la ejemplifica en su lado carnavalero, del cual me atrevería a decir incluso que es el que más emoción le provoca. Llegó a encarnar, en 2009, el papel de “Capitán Cañailla” como pregonero del Carnaval de su tierra, ¡Qué honor, pregonero en su tierra! Quien se lo iba a imaginar, cuando en su infancia, fiel a su cita, no fallaba ningún año al Cine Alameda junto a su abuela Catalina y a mi madre, para disfrutar de agrupaciones como “Los combois da pejeta” o “Las momias de güete”.

“Cómo se iba a imaginar en su tierna infancia carnavalera que acabaría pisando las tablas del Gran Teatro Falla. Fue el culpable de mi sana enfermedad por el Carnaval, de haberme convertido en un auténtico jartible, al inculcarme el veneno hablándome desde pequeño de Requeté o de Juan Rivero, o lo que es lo mismo, de “Los pollitos mi compare” o “El profesor Majareta y los niños probeta” y al llevarme cada año a disfrutar del carrusel de coros de la Plazoleta de las vacas el domingo de carnaval, junto a sus amigos Manuel, Juan, Diego o sus queridas Isa y María.

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“Y, por último, seguramente, su afición más conocida por todos, su afición futbolera, siendo el actual socio número 641 del Club Deportivo San Fernando, equipo en el que, como todos sabéis, terminó de desarrollarse como portero, en el viejo Marqués de Varela. Una etapa de la que tantas anécdotas me han contado siempre mi tío Manolín, mi tío Paco y mi abuelo, que eran los que le solían acompañar a cada entrenamiento y partido o mi madre, que observaba a su amor cómo entrenaba todos los días desde la ventana de la cocina de su casa, que justo daba al estadio”.

“Su paso por el San Fernando le sirvió para dar el salto al equipo de su vida, el Sevilla Fútbol Club, el cual le ha permitido obtener el reconocimiento internacional por su excelente labor, más como Director Deportivo que como portero, todo hay que decirlo. Gracias a ese reconocimiento internacional ha ayudado a propagar el nombre de San Fernando por lugares que nunca antes habían oído hablar de esta ciudad, llevando incluso el sobrenombre de “el león de San Fernando”, letra que también se usa para corear su cántico por la afición sevillista. Sobra explicar, obviamente, cómo ha calado en mí esa pasión futbolera que me ha transmitido mi padre desde pequeño”.

“Aparte de mi lado sevillista, que todos conocéis, también soy socio número 642 del San Fernando, socio de Orgullo Isleño y acostumbro a acudir, cuando el Sevilla me lo permite, a La Curva Madariaga de Bahía Sur y a los desplazamientos que puedo, como haré este domingo próximo en Algeciras. Que, por cierto, aprovecho que está aquí presente la directiva del San Fernando para decirles que hay que ganar como sea al Algeciras y salir de la zona peligrosa de la tabla”.

“Así que ya habrán visto lo que significa San Fernando para mi padre, y sabrán la ilusión que le hace este reconocimiento, como de igual manera nos la hace a nosotros. A sus hijos, María y un servidor, a su mujer, a sus hermanos, a su madre y seguro que también se la haría a su padre”-

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“Por último, habrán podido comprobar cómo ha inculcado en mí ese amor incondicional por La Isla, por lo que a modo de conclusión me van a permitir que hoy, tras todo lo expuesto, no concluya como debiera hacerlo esta especie de prólogo, y que hoy desde este atril y delante de todo el respetable, termine el discurso dándole las gracias a mi padre por dejarme este legado cañaílla”.

“Gracias papá por despertar en mí ese sentimiento de pertenencia a San Fernando y ese orgullo isleño. Nunca me cansaré de decirle al mundo entero que, como mi padre, “Yo soy de la Isla de León”.

Viva La Isla y viva su nuevo hijo predilecto, mi padre”.

El discurso de Monchi, que duró 20 minutos, al completo

"Mi tierra eres tú, mi gente eres tú. El destierro y la muerte están donde no quieres tú. Y mi vida eres tú".

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"Alcaldesa de San Fernando, miembros de la Corporación Municipal, vicepresidente de la Federación Andaluza de fútbol, presidente del Sevilla FC, miembros del Consejo de Administración, presidente del Club Deportivo San Fernando, presidente del Grupo Empresa Bazán, presidente de mi primer club, CD Águila, hermano mayor del Perdón, del Nazareno, de la Pastora, del Carmen, Santa Elena y resto de autoridades y de los sectores sociales de San Fernando".

"Antes de repasar por mi presente, mi pasado y mi futuro, leyendo con el corazón lo que he escrito con el alma, y antes de derramar en este Teatro todas mis vivencias, mis locuras y mis desatinos, me gustaría mirar hacia arriba y dedicarle todo lo que voy a contar a aquellos que, sin estar aquí con nosotros, lo están más que nunca".

"A las dos mujeres, que sin ser de mi familia, más he querido, como Isa y María, cañaílla una y sevillana la otra. Mi eterna dualidad. Sevilla y San Fernando. San Fernando y Sevilla".

"A Manolo, que le da a mis hijos su segundo apellido, el que engendró junto a Amparo a la mujer de mi vida y que disfrutaba de su pueblo como pocos. Un cañaílla de pro".

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"Y a Ramoné, qué te voy a decir a tí que no te haya dicho. Si hablo todos los días contigo. Habiéndote ido demasiado pronto, más has estado conmigo. Mi espejo, mi ídolo, mi padre. Isa, María, Manolo y Ramoné, mis amigas, mi suegro y mi padre, gente buena, gente sana, gente que merece la pena y que ha marcado mi vida y a los que llevaré en lo más profundo de mi alma. Allá donde estéis, que sepáis que os quiero mucho. Va por ustedes".

"Por mucho que uno haya vivido, por mucho que uno haya sentido y disfrutado, la vida se empeña en regalarte nuevos momentos que compiten con los anteriores por un sitio privilegiado en ese baúl de los recuerdos que es nuestra memoria. En ocasiones consiguen suplantar o sustituir a otros momentos únicos que parecían inigualables".

"Acabo de recibir el título de Hijo Predilecto de San Fernando, de la Real Isla de León, de mi pueblo, del lugar donde nací, donde me crié y del que me fuí hace 35 años, pero del que nunca me he ido. El corazón nunca olvida el lugar donde se dejó sus mejores latidos y siempre se vuelve al lugar donde uno ha sido feliz".

"Me tengo que pellizcar para saber que no es un sueño, que es una realidad que supera el mejor de mis sueños. La vida tiene tantos vericuetos, tandas idas y venidas que cuando menos te lo esperas la confusión campa a sus anchas y lo que debería ser un sueño se convierte en realidad. Lo que ayer ni siquiera había imaginado, hoy lo estamos viviendo".

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"En este laberinto de la vida, los caminos, los hechos te trasladan de un sueño tópico a una realidad palpable. Y ahí me encuentro yo, pensando que en cualquier momento suena el despertador y despierto de este sueño que me está tocando vivir. Un sueño que nunca soñé, la realidad que jamás pensé vivir".

"El niño que vivía a caballo entre los barrios de San Ignacio y la Pastora, que le daba patadas a un balón al mismo tiempo que tomaba el biberón y que se echó su primera novia con pantalones cortos, está recibiendo hoy el galardón más importante que una ciudad, un pueblo o un municipio puede conceder, pero Hijo Predilecto no, privilegiado. Eso soy yo aquí".

"Llegado este momento me hago la pregunta que seguro os habréis hecho muchos de los que estáis aquí cuando supísteis el nombramiento, los motivos de este reconocimiento y qué meritos he hecho para recibir este título".

"Siendo sincero me cuesta responder a esta pregunta, pero intentando buchear en el mar de las explicaciones quiero entender y percibir que todo tiene que ver con el amor y cariño que le proceso a La Isla".

"Nunca he renunciado a ello, al contrario. Siempre he presumido de ser cañaílla y siempre he vivido los vientos por mi tierra, por ese trozo de universo que pone la frontera donde le viene en gana, vacilándole y frenando por el norte y el este a Puerto Real, parándole los pies por el oeste a Cádiz y marcando territorio por el este y por el sur a Chiclana. Privilegiado de vivir en esta parte del planeta, que se convierte en Isla porque así lo quiere el caño Sancti Petri y el oceáno Atlántico".

"Devoción y fidelidad por partes iguales a este lugar tan maravilloso y donde es un privilegio nacer. Un sitio donde al mezclar un quejío de Camarón, un poema de Montiel, el Bartolo, la sal de nuestras salinas, un loco víctima del levante contándote que llegan los marcianos, el pilao cantando por Chano Lobato, un plato de menudo de Rosita, de casa El Naca, un mecío de banda a banda, unos varales crujiendo cuando baja la calle Ancha, el Club Deportivo Águila, la gracia de Juan Rivero y el Requeté. Con todo eso se configura un ecosistema humano propio, un microclima sentimental que convierte a mi tierra en un lugar difícil de igualar".

"Mi relación no es amistad superficial, no es una relación interesada. Es mucho más. Es amor, devoción, deseo. Y como el movimiento se demuestra andando, y para que nadie dude de mis palabras, mis próximos versos tendrán un único objetivo, una única razón, un único motivo. Declarar el amor a mi pueblo, a mi Isla, a mi Isla de León, en este Teatro y con vosotros como testigos".

"Te quiero San Fernando, pero sin filtros, sin dobleces, por derecho, sin ruido, sin estridencias, de forma sencilla y cercana, de verdad, sin trampucherías. Lo mío es un amor sincero e infinito. En esta relación afectiva salgo ganando, me llevo la mejor parte y salgo vencedor porque soy un privilegiado por haber nacido en la cuna de la libertad, en el kilómetro cero de la democracia, en la tierra de Camarón, en el lugar donde empezó todo".

"Llegar a donde he llegado, conseguir lo que he conseguido y disfrutar lo que he disfrutado ha traído consigo tener que pagar un alto precio. Haberme alejado de tí, de tus barrios, de tus calles, de tu gente, de tus costumbres, de tus fiestas, de tu aire, de tu olor".

"Por ello, ahora que ya he superado con creces los 50 años, siento más que nunca la urgencia de volver a mi ciudad natal, a impregnarme de su aliento marinero, de volverme loco con el levante, de ver el blanco de tus salinas, a perderme en el laberinto de sus calles, de reencontrarme con mi niñez. Lo necesito".

"Me está llegando la hora de que conviene que todas las cosas vuelvan a su sitio porque me podré despedir de tú una y mil veces más, pero seamos realistas. Ya no sé cómo irme, cada vez me cuesta más".

"Pero antes de que llegue ese momento le tengo que pedir permiso a Sevilla, mi sitio dorado y que me debe dejar ir sin que ella se enfade, que comprenda que por mucho que la quiero, y la quiero tela, más quiero a San Fernando. Seguro que llegaremos a un entendimiento porque un padre y una madre no quieren nada malo para su hijo, sea predilecto o no".

"A partir de aquí mi glosa gira 180 grados y las palabras de amor vertidas anteriormente mudan su tono y se convertirán en palabras de agradecimiento, que deben brotar desde lo más hondo de mi corazón. Deben ser palabras que expresen con total pulcritud lo feliz y orgulloso que estoy de estar aqui, recibiendo este reconocimiento y rodeado de mi gente, mi familia y mis amigos. Aquellos que con su cercanía, apoyo, paciencia y amistad han conseguido hacer del niño que un día fuí, el hombre que ahora soy".

"Gracias en primer lugar a nuestra alcaldesa y a todos los grupos políticos de la Corporación Municipal por haber aprobado este nombramiento de manera unánime. Gracias Patricia, Fran, Carlos, Ana, Francisco José y María José".

"Gracias a mi club, al Sevilla FC, el club de mi vida y que me ha dado todo lo que hoy soy profesional y humanamente. No me late mi corazón, me late tu escudo. Sevillista no nací, pero moriré sevillista".

"No creo que tenga palabras para describir la gratitud hacia mi equipo y las personas que me han acompañado en esta bendita travesía. Personifico estas palabras de agradecimiento en mis tres presidentes Roberto Alés, que en gloria esté, José María del Nido y Pepe Castro, y en los miembros de los Consejos de Administración con los que he convivido. Gracias por haber depositado vuestra confianza en mi persona y estar aquí hoy es una muestra más del cariño que me tenéis".

"Agradecimiento inmenso a mis compañeros de la dirección deportiva del Sevilla FC, a los de antes y a los de ahora. Sóis mi mayor tesoro y sin vosotros no hubiera sido posible nada de lo que soy hoy en día. No sólo sóis los mejores, y lo digo ahora que llueve mucho, también sóis lo más leales y honrados. Y lo habéis vuelto a demostrar acompañándome en este acto tan importante para mí. Los líderes no crean seguidores, son los que crean más líderes y vosotros sois líderes y campeones. Con esta infantería es imposible no seguir ganando batallas y alguna guerra. Que nadie nos dé por muertos. Ya sabéis lo que dice nuestro himno, que nunca se rinde".

"Gracias a mis hermanos y amigos del Perdón, Manuel, Carlos y Ramón, por permitirme saborear y disfrutar de lo que, sin lugar a dudas, han sido los más años más bonitos e intensos de la hermandad y hacerme partícipe de ese crecimiento que convertirá a la hermandad en santo y seña del Jueves Santo de La Isla".

"Gracias a Pepe y mis dos Javis, el capataz y el volante. A tí Pepe, como hermano mayor de la hermandad señora de La Isla, por darme la oportunidad de que ahora sea hermano del Nazareno, el cristo de mi infancia, y poder rezarle de tú a tú a Lola y al viejo y realizar un sueño del que mi padre se sentiría orgulloso. Gracias Pepe".

"Y ahora voy a por el capitán y el volante, Javi Padillo y Javi Garrido. Por mil vidas que viviera me faltarían algunas para daros las gracias por permitirme tocar el cielo con mis manos. No existen palabras para describir lo vivido en estas dos últimas Madrugadas".

"Gracias a los de siempre, a los de mi barrio, a los del kiosco. Gracias por ser capaces de alargar mi infancia hasta el presente. Que 50 años después sigamos manteniendo la relación habla mucho y bien de vosotros. Recuerdo como si fuera ayer todas nuestras golfadas y gamberradas de chavales y menos mal que algunas han prescrito con el tiempo".

"Nacimos en un barrio humilde y obrero y donde aprendimos a sobrevivir sin renunciar a nada. Curtimos una amistad sólida que se mantiene con el paso del tiempo y no podiáis faltar hoy aquí. Cuando terminemos nos iremos a poner sillas al cine Madariaga para poder entrar de balde. Saltaremos la pajareta del Marqués de Varela y con un balón lleno de remiendos soñaremos con ser Chicha, Blanquito, Mariano o Silva. Y como colofón mangaremos algunos cajillos para luego revenderlos y con los diez duros que nos den nos compraremos unas chucherías".

"Agradecimiento al son de un pasodoble a la gente sin filtro, la carga contínua y como dice nuestro himno, os dije que la vida es bella y si miramos a las estrellas nos encontramos tú y yo. Cada vez que os he encontrado siempre os he encontrado y eso no tiene precio. Mi Cani, mi Hugo, mi Fede, mi Germán, mi Pote, mi Julio, mi Quique, mi Carlos y mi Álex. Que nunca nada ni nadie nos separe".

"Monchi, Mendi, Cortina, Patudo, Cepillo, José, Juan José, Núñez, Ramón, Abad y Pablo. Esta alineación me retrae al Marqués de Varela, al marcador simultáneo, a Luis Periñán, a Tracatrá, a fútbol de antaño, a botas remendadas, a mataúras en la rodilla, pero me lleva sobre todo a mi primer sueño cumplido, jugar en el Club Deportivo. Esta tarde están aquí algunos de los que compartieron conmigo esa aventura, algunos de los que me enseñaron los códigos de un vestuario, lo que es ser compañero, lo que es remar en una misma dirección en busca de un objetivo común. Valores que me sirvieron en el futuro para poder navegar en ese mundo tan difícil como es el fútbol profesional. Gracias por lo pasado y por el presente".

"Llegado este punto voy a bajar un poco el compás y voy a pedir menos pasos al capataz porque ahora me voy a detener en mi familia. Y quiero recrearme un rato porque no hay prisas".

"Mi madre la que me parió, Maruja, la hija de Catalina y la madre de Catalina. Si para San Fernando soy su hijo predilecto para ella siempre he sido su hijo preferido, su ojito derecho, su niño mimado. Gracias mamá por las horas dedicadas a amasar mi futuro dándole forma al hombre que hoy soy. Entre besos, abrazos, con sonrisas dibujadas, con cariño infinito. Como no voy a quererte si eres la razón de mi vida, si diste toda tu vida por mí. Madre no hay más que nunca y yo tengo la mejor".

"Caty y Manolín, aquellos con los que comparto la misma sangre y el mismo amor. Gracias por aceptarme como soy, por estar siempre a mi lado, por hacer vuestras mis penas y mis alegrías. Creo que os lo he dicho poco, posiblemente nunca, pero hoy lo váis a oir de mis labios. Os quiero mucho, más de lo que pensáis".

"Voy a por tí Ana. Mi cortafuegos contínuo, el contrapeso ideal, el pañuelo de mis llantos, el hombro que siempre tengo. La mejor madre, mi fiel compañera, la testigo de mi vida, el sosiego, la paz, la tranquilidad, el equilibrio. Todo eso eres tú Ana y gracias por estar ahí siempre".

"Y entrando en la recta final del recorrido, el Hijo Predilecto se va a detener en sus dos predilectos, en mis dos hijos, lo único que es mío de verdad. Mis herederos, no de fortuna ni riquezas, herederos de mi sangre. Álex y María. La noche y el día, el sur y el norte, el blanco y el negro, diferentes los dos e iguales a más no poder".

"Álex es mi copia más perfecta. María es mi bendita locura. No existe ningún verbo ni ninguna palabra, nada que pueda acercarse a lo mucho que os quiero, pero sobre todo lo mucho que os necesito para que mi vida tenga sentido. Esta es mi familia, todo lo que soy hoy, mucho o poco, es gracias a vosotros, al tiempo que os he quitado y al tiempo que habéis comprendido que necesitaba para mí. Os quiero con toda mi alma. Y termino. No sé si existe otra vida, si hay un más allá, si después de irnos volvemos, pero si existe algo así y algún día tengo que volver a vivir, yo quiero volver al mismo sitio y rodeado por la misma gente. Quiero que esa nueva película de mi vida sea en el mismo escenario y con los mismos actores. San Fernando y vosotros, mi pueblo y mi gente y que pueda decir de nuevo a los cuatro vientos, que no todo el mundo puede ser de La Isla".

Las palabras de la alcaldesa que cerraron el brillante acto celebrado en el Teatro

"Es un absoluto privilegio para mí como alcaldesa poder presidir este acto de homenaje y de reconocimiento que esta, su ciudad, dedica a Ramón Rodríguez Verdejo.

"A nuestro Monchi. Al Monchi que ha alcanzado el Olimpo con su trayectoria profesional. Al que el fútbol le permitió llenar las vitrinas con éxitos como jugador y como director deportivo. Al que debutó, como nos han recordado hoy, en el Águila y pasó por las filas azulinas. Al que ya hemos podido ver que le provoca una profunda emoción este título de Hijo Predilecto que le otorgamos hoy".

"Un reconocimiento público que, deseo de corazón, compita con todos esos trofeos que atesoras. No se me ocurre mayor motivo de orgullo que el sentirse querido y reconocido por los tuyos. No todas las personas tienen esa suerte y el privilegio de vivir un día tan emotivo como el de hoy, en el que todos los isleños e isleñas nos hemos querido unir para darte el homenaje que mereces".

"Desde que se hizo público que serías Hijo Predilecto de San Fernando no hay un día que alguien no se me haya acercado a agradecerme que se diera este paso, o para narrarme que su hijo o su marido jugaron contigo y ya vieron en tus maneras y en tus ojos la ambición de llegar lejos, y que se sienten orgullosos de haber podido compartir parte de esos momentos en los que empezó a forjarse la leyenda del León de San Fernando. Desde la Isla a lo más alto de del Deporte Rey".

"Yo sé que el sevillismo te idolatra, que eres una de las figuras más importantes de un club legendario. Muchos de ellos te acompañan hoy aquí. Y sé que esa pasión es mutua. Porque amas esos colores.

Pero deben perdonarnos a tus paisanos que nos disputemos con ellos tu cariño. Porque el isleñismo también te lleva a gala, y tú haces gala de isleñismo por los cuatro costados. En tu día a día, en tus redes sociales, siempre que puedes".

"Tengo claro que el Sevilla y su afición se esfuerzan, y te dan calor y aliento. Pero es que, Monchi, esta es la tierra de tus abuelos, de tu mujer, de tus hijos –ya lo ha dicho con pleno orgullo Ale aquí- y de tus padres Ramón y Maruja, que tan conocida y querida es en la Isla".

"No sabes lo que supone, como alcaldesa de esta ciudad, ver cómo llevas por bandera a San Fernando allá donde vas y donde te preguntan. Y cómo respondes a cada petición y llamadas que te hacemos desde tu tierra. Siempre queriendo sumar, deseando aportar… "

"Eres un isleño de pro, y por eso no dudamos ni un minuto en dar los pasos necesarios para que tu nombre formara parte de este grupo de vecinos y vecinas excepcionales que nos honran por sus méritos, y que nos representan.

Incluso naciste un día en las cercanías de un 24 de septiembre. Ya eso marca carácter isleño de por vida. Y da identidad".

"Dice Luis García Montero que sin identidad nadie se siente responsable de nadie. Y que los individuos condenados a la soledad y al vacío son incapaces de habitar la palabra nosotros. Nosotros, esa palabra en la que se edifican los valores de la convivencia, los vínculos de la solidaridad. Esos que tú has defendido a lo largo de toda tu vida y trayectoria profesional".

"Déjame decirte que con este nombramiento, la máxima distinción de que dispone esta ciudad, adquieres también una gran responsabilidad. Pero sé que dejamos en las mejores manos la defensa y promoción de San Fernando, y de todo lo que nos define como una ciudad orgullosa de su historia y su memoria, una ciudad comprometida con su futuro".

"Son isleños e isleñas, muchos, los que se acuerdan de tus inicios en uno de los mejores equipos juveniles de nuestro club azulino. Algunos aún recuerdan la alineación: Pablo De Diego, Pepito, Juanito, Marcos Alías, y Monchi. Qué buenas tardes dio aquel equipazo en el ya desaparecido Marqués de Varela que ha venido a nuestra memoria".

"Azulino, como tu hermano Manolo, que junto a tu hermana Caty te miran hoy orgullosos desde este patio de butacas. Como te mira el resto de tu familia. Como te miramos todos y todas los que te acompañamos hoy".

"Has dedicado tu vida a los tuyos, y al deporte. Y, como dijo en tiempos más aciagos Nelson Mandela, el deporte tiene el poder de transformar el mundo, de inspirar, de unir a la gente como pocas otras cosas. Tiene más capacidad que los gobiernos de derrumbar barreras".

"También son isleños los que comparten pasión cofrade contigo en el Perdón, o la Divina Pastora, o cargando emocionado sobre los hombros a la madre del Nazareno, la Virgen de los Dolores, ésa que de niño veías junto a tu abuela".

"Porque no solo mantienes, sino que alimentas y fortaleces tu vínculo con las tradiciones isleñas. Por eso te escapas siempre que puedes a la que sigue siendo tu casa. Y es que si, como escribió Rilke, la verdadera patria del hombre (y de la mujer) es la infancia, la tuya se fraguó para siempre en el territorio entre la Pastora y San Ignacio".

"Fuiste también un magnífico padrino de nuestra Navidad, dando luz a una de las fechas más bonitas de San Fernando. Y Rey Mago, uno de los privilegios más emocionantes y envidiados de los que puede tener alguien en esta ciudad. Y pregonero del Carnaval, ese que te apasiona y cuya afición compartes sobre todo con tu hijo. Nos encanta verte disfrutarlo, como también de tu Feria del Carmen".

"Gracias por presumir de isleñismo, por profesar ese enorme amor a esta ciudad y a todas sus costumbres y tradiciones. Los que te conocemos y te hemos tratado sabemos que es de corazón".

"Por todo ello, esta ciudad solo puede sentir orgullo por ti y por que te sientas parte de ella, porque la lleves a gala".

Hoy tu querido amigo Fede Quintero y tu hijo Ale, en nombre de tu familia, han glosado y ensalzado tus méritos, cualidades, virtudes y talento. Esos que te han traído hoy a este magnífico Real Teatro de Las Cortes. Las que te hacen ser un ejemplo".

Y es que ese es uno de los aspectos más importantes de este reconocimiento que nos reúne hoy aquí. Porque no hay nada más importante para una sociedad que tener referentes, disponer de espejos como tú en los que mirarnos".

"Monchi, gracias por ser un isleño universal. Por demostrarnos que todas y todos podemos alcanzar el éxito con dedicación y pasión por lo que hacemos".

"Qué orgullo estar hoy aquí junto a aquel chaval de 18 años que cogió la autopista hacia Sevilla y en la actualidad es uno de los profesionales del fútbol de más prestigio a nivel nacional e internacional".

"Hoy, la ciudad de San Fernando y tú renováis vuestro compromiso y los vínculos que te van a mantener unido, a ti y a los tuyos, para siempre con esta ciudad de historia, de arte, de luz, de marinas, salinas y esteros, de genios".

"Te felicito efusivamente por la concesión de este título de Hijo Predilecto".

"Enhorabuena Monchi. Y enhorabuena a todas y todos los que te disfrutamos como ejemplo, como vecino y como amigo en tu Isla. En La Isla del León de San Fernando. Felicidades".