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Ocho filiales de Primera suben a Primera RFEF, cinco bajan y cuatro buscarán el ascenso por la segunda vía

Ocho filiales de Primera División han ascendido a la Primera RFEF, cinco descienden a la Segunda RFEF y otros cuatro buscarán subir a la Primera RFEF por la segunda vía

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Gaby Cumbreras - 29 mar 2021 - 10:45 CEST

El desmantelamiento del At. Madrid B, que ganó el trofeo de la Sal en agosto de 2019, le ha pasado factura con el descenso a la Segunda RFEF. | Foto: **Gaby Cumbreras**

La fase regular en la Segunda B deparó este domingo los ascensos a la Primera División RFEF del Celta B, Unionistas de Salamanca y Zamora en el grupo 1 (donde el Deportivo no pudo subir pese a ganar al Zamora por 2-0), del Bilbao Athlétic tras ganar en el grupo 2-A al Real Unión (0-1) en Irún y del Andorra en el grupo 3-A gracias a su empate (1-1) en Lérida.

De ese modo sólo falta por conocer el equipo que acompañe al Tudelano y al Calahorra en el grupo 2-B y que se sabrá el miércoles, fecha fijada por la RFEF por la cuarentena. La SD Logroñés es tercero con 26 puntos y tiene todo a favor ya que visita al colista Haro Deportivo, mientras que el CD Ebro del isleño Carri (25 ptos) necesita ganar al Izarra y que pierdan los riojanos.

De ese modo, ya hay 29 equipos que tienen garantizada su participación en la Primera RFEF como son Celta B, Unionistas Salamanca, Zamora, Burgos, Cultural Leonesa, Valladolid Promesas, Real Sociedad B, Bilbao Athlétic, Amorebieta, Tudelano, Calahorra, Nástic de Tarragona B, Barcelona B, Andorra, UD Ibiza, Alcoyano, Villarreal B, Algeciras, San Fernando CD, Sanluqueño, UCAM Murcia, Linares, Betis Deportivo, San Sebastián de los Reyes, R.M, Castilla, Dux Inter de Madrid, Badajoz, Extremadura y el Talavera, aunque cuatro de ellos jugarán finalmente en la Segunda División.

Los aspirantes a las diez plazas de ascenso restantes

Por otro lado, los 32 equipos que aspiran a ocupar las otras diez plazas restantes en la Primera RFEF, a través de la fase de ascenso con los 4º, 5º y 6º clasificados y que lograrán los dos primeros de cada grupo, son Deportivo, Rácing Ferrol, Compostela (1 A), Numancia, Langreo, Marino de Luanco (1 B), Real Unión de Irún, Rácing de Santander, Arenas de Getxo, Laredo (2 A), CD Ebro o SD Logroñés, Mutilvera, Osasuna B (2 B), Llagostera, Cornellá, Badalona y Lérida (3 A), Hércules, La Nucía, At. Levante (3 B), Balona, Tamaraceite, Cádiz B (4 A), Sevilla Atlético, Córdoba, Real Murcia (4 B), Rayo Majadahonda, Atlético Baleares, Navalcarnero (5 A), Villanovense, Don Benito y Mérida (5 B).

Ocho filiales han ascendido a Primera RFEF y cinco han descendido a Segunda RFEF

Entre los 29 ascendidos a la Primera RFEF figuran ocho filiales de equipos de Primera División, como son el Celta B, Valladolid Promesas, Real Sociedad B, Bilbao Athlétic, Barcelona B, Villarreal B, Betis Deportivo y Real Madrid-Castilla.

Por su parte, cinco filiales de Primera (At. Madrid B, Valencia Mestalla, Getafe B, Alavés B y Recreativo Granada) y cuatro de Segunda (Español B, Las Palmas Atlético, Sporting de Gijón B y Oviedo Vetusta) jugarán la próxima temporada en la Segunda División RFEF y tendrán que evitar ahora caer en la Tercera División RFEF.

Además, otros cuatro filiales de Primera, como es el caso del Sevilla Atlético, Cádiz B, Osasuna B y Atlético Levante, buscarán el ascenso a Primera RFEF por la segunda vía o tendrán que verse obligados a descender una categoría y jugar la próxima temporada en la Segunda RFEF